El departamento de Calidad Urbana del Ayuntamiento de Igualada ha iniciado este otoño el Plan Municipal de Reposición del Arbolado 2018-2019. Este plan implica, anualmente, la sustitución de árboles considerados poco adecuados para el medio urbano por otras especies más adecuadas y también la reposición de aquellos árboles que, en los últimos años, han tenido que ser retirados por enfermedad, muerte o porque se han visto dañados en episodios climatológicos.
Ha dado los detalles del alcalde de Igualada, Marc Castells. Según explicó, en la pasada campaña 2017-2018 ya se retiraron 89 árboles muertos o de especies consideradas poco adecuadas porque provocan alergias en la población o porque tienen raíces que dañan el asfalto y las aceras. En muchos casos, además, estos árboles han adquirido gran tamaño, sus ramas provocan molestias a los edificios cercanos y pueden suponer un peligro en días de fuerte viento.
Los 89 árboles retirados el año pasado se han sustituido por nuevas especies consideradas más indicadas para el medio urbano y se han plantado 73 de más -162 en total- en alcorques vacíos o en parques y plazas donde había que reforzar el arbolado. Las especies retiradas son en general pinos, plátanos, moreras y olmos. Y las especies que se plantan en su lugar son, entre otros, cerezos de Japón, perales de flor, manzanos, árboles de Júpiter, Jodan o Espinalba. La retirada de los árboles existentes se lleva a cabo en otoño y la plantación se hace entre el otoño, invierno y primavera, en función de lo que es más adecuado para cada variedad. Castells pone de relieve el hecho de que "apostamos por la renaturalización del entorno urbano, queremos una ciudad agradable y amable para todos aquellos que viven en ella y, por ello, en dos años tendremos plantados más de seiscientos nuevos árboles en la ciudad, al tiempo que seguimos desarrollando el Anillo Verde, proyectamos la ampliación del Parque Central o trabajamos en la mejora continua del espacio público desde la Unidad de Barrios, entre otras muchas acciones".
Esta temporada 2018-2019, la intervención tendrá un alcance superior. Se están retirando un total de 152 árboles y se prevé plantar 508. En concreto, los árboles que se están retirando corresponden a diferentes puntos de la Av. Montserrat, las calles Magnòlies, Tulipes, Crisantems y Capità Muntaner, de la Av. Barcelona, de la c / Dr. Pujadas o del Parque de la Solidaritat. Y, entre este otoño, invierno y la próxima primavera, se deben plantar los más de quinientos nuevos árboles previstos, no sólo en estas ubicaciones, sino también en las calles Badalona, Coral la Llàntia, Mn. Josep Forn, Pere Dalmases, Lleida, Dr. Pujadas, Nards, Orquídeas, Camèlies, Joan Serra y Constansó, CEU, Capità Muntaner, Guixeres, Salvador Espriu, Carles Riba, Bèlgica, Lecco, President Francesc Macià, President Josep Irla, President Pau Claris, Doctor Botet y Parlament, a las avenidas Generalitat, Pau Casals, Europa, España y Latinoamérica y Vilanova y la Pl. Sant Crist. Aparte, la Brigada Municipal reforzará el arbolado en lugares como el patio del Museu de la Pell, la zona de descanso de los huertos urbanos del Rec, los parques Central, Vallbona y Puigcornet, la Pl. de la Bomba, el camino de Can Masarnau, las avenidas Gaudí, Balmes, Dr. Pasteur, Europa y Àngel Guimerà, la Ctra. de Manresa, la Pl. Mestre Just o las calles Òdena y Comarca, entre otras.
En definitiva, pues, en estas dos temporadas, se habrán retirado 241 árboles y se habrán plantado 670 y, tal como ha recordado Marc Castells, estas acciones supondrán "no sólo la eliminación de molestias a la ciudadanía y de inconvenientes para el mantenimiento del espacio público, sino también el hecho de que Igualada habrá ganado más de cuatrocientos nuevos árboles".
La previsión de la concejalía de Calidad Urbana es terminar las tareas correspondientes al actual Plan Municipal de Reposición del Arbolado entre el primer y el segundo trimestre del año 2019.