La sección de Movilidad del Ayuntamiento de Manresa ha iniciado las obras de implantación -por primera vez en la ciudad- de un paso de peatones inteligente en la calle Francesc Moragas, en el cruce con la calle del Cuerpo. En este paso de peatones se colocarán unas señales verticales y balizas de led en el pavimento que se iluminarán cuando detecten peatones mediante sensores de presencia.
Esta actuación da respuesta al proyecto "Manresa a Paso Seguro", que fue presentado por el Montepío de Conductores de Manresa-Berga y seleccionado por la ciudadanía dentro de los Presupuestos Participativos 2019. El proyecto tenía un presupuesto de 50.000 € y planteaba acciones como pasos de peatones inteligentes iluminados e instalaciones de radares pedagógicos que indican la velocidad a la que se circula. Estas propuestas tienen el objetivo de reducir los atropellos y de sensibilizar respecto de la velocidad y los pasos de peatones.
Una vez instalado este primer paso de peatones inteligente, el Ayuntamiento instalará otro ante el acceso al Hospital de Sant Joan de Déu, con un sistema similar que, mediante señales verticales con leds y placas luminosas en el pavimento, también se activarán automáticamente con la detección de presencia de peatones.
Dentro del mismo proyecto "Manresa a Paso Seguro", en estos momentos se está trabajando en la instalación de cuatro radares pedagógicos, que darán la información de la velocidad a la que se circula. Los puntos que se implantarán son los siguientes:
• En la carretera del Puente con la calle Trieta (sentido ascendente).
• En la avenida de las Bases de Manresa con la calle cintas (en dirección plaza de la Cruz).
• En la avenida de los Dolores con la calle Estanislau Casas (sentido salida).
• En la carretera del Pont de Vilomara, entre las calles de Domènec i Muntaner y la calle de San Juan de Dios (sentido entrada ciudad).
Estos radares pedagógicos no tienen funcionalidad sancionadora, sino que pretenden sensibilizar a los conductores de la velocidad a la que realmente circulan de manera que la puedan adaptar a la establecida para la vía.
Se prevé que estos trabajos duren unas cuatro semanas aproximadamente. Los sistemas activarán posteriormente, una vez finalizada su instalación.