El Gobierno municipal ha puesto en marcha un Plan de mejora del alumbrado público cuyo objetivo es conseguir que los 30.000 puntos de luces que hay en Badalona sean de tecnología LED. Este tipo de iluminación, que sustituirá a la tradicional como las bombillas halógenas o incandescentes, tiene numerosas ventajas como la eficiencia energética, su mantenimiento, la durabilidad y que no contienen gases nocivos ni productos químicos tóxicos. El Plan comienza a ejecutarse este mes de noviembre y estará terminado antes de que finalice el actual mandato municipal.
Este anuncio lo ha hecho el alcalde de Badalona, Xavier Garcia Albiol, el teniente de alcaldía del Ámbito de Territorio y Sostenibilidad, Daniel Gracia, y el concejal del Área de Vía Pública y Movilidad, David Mejía, en la sala de prensa del edificio municipal El Viver. El alcalde ha señalado que: "este plan es muy necesario porque actualmente la iluminación de nuestras calles es totalmente deficiente, tanto desde un punto de vista medioambiental, como desde la vertiente económica y de la seguridad". En este sentido , Garcia Albiol ha destacado que "además de adaptar a la tecnología LED todos los puntos de luz que en estos momentos hay en la ciudad, instalaremos nuevas farolas en todas las calles que no están suficientemente bien iluminadas para favorecer que los vecinos y vecinas vivan con la mayor seguridad posible en todos los barrios de Badalona".
De los 30.000 puntos de luz en Badalona, sólo el 10% funcionan con tecnología LED. Por otra parte, en estos momentos unos 4.000 puntos de luz son farolas de 4 metros con el báculo o columna terminado en globo. En una primera fase, que estará terminada antes de que finalice el año, se renovarán 400 de este tipo de farolas situadas en zonas como la calle de Prim; calle de la Riera de Canyadó, los alrededores de la plaza de la Pipa del barrio de Llefià; Nova Lloreda, la zona sur del barrio de Pomar y en el barrio de Canyadó.
El Ayuntamiento de Badalona destina anualmente unos 3,5 millones de euros en la iluminación de la vía pública. Con la renovación de los puntos de luz amarilla a luz de LED, el ahorro energético se situará entre un 50% y un 60%. El Plan de mejora del alumbrado público contempla también la instalación de nuevos puntos de luz en aquellos espacios de la ciudad donde se han detectado deficiencias en la iluminación.