La sección de eficiencia energética del Ayuntamiento de Calonge ha puesto en marcha un estudio para calcular la cantidad de energía que podrían generar gracias a las aguas fecales del alcantarillado. El sistema consistiría en acumular la materia orgánica de las aguas sucias y someterla a un proceso de fermentación con digestión anaeróbica, sin la presencia de oxígeno para la generación de biogás.
Se trata de una tecnología relativamente extendida en Europa central, donde el gas alimenta un motor de cogeneración eléctrica y, al mismo tiempo, se aprovecha el calor de la combustión del motor para calentar agua. Las estimaciones iniciales hablan de producir hasta 375 kW diarios, pero ahora se están empezando a analizar el caudal de aguas fecales y el volumen de materia orgánica con el objetivo de disponer de datos más precisos a finales del mes próximo.
El concejal de Medio Ambiente, Carlos Bonet, explica que es "un proyecto innovador y pionero que podría permitir reducir aún más el coste de la factura energética del municipio", que después de las medidas recomendadas por la auditoría energética de la empresa PGI engineering prevé ahorrar 395.000 euros más de electricidad en los próximos cinco años.
Bonet, sin embargo, supedita el proyecto del biogás a la viabilidad técnica y económica. En el Ayuntamiento buscan la posibilidad de dar salida a la energía a través del consumo eléctrico directo y, en cuanto al calor, se podría suministrar a instalaciones municipales o bien se podría vender a edificios con una alta demanda energía eléctrica y agua caliente, como podrían ser complejos deportivos o industriales.
Fuente: El Punt Avui