El primer tratamiento inmunocontraceptivo ya se ha aplicado en un ejemplar en el municipio de Matadepera. La fase experimental del proyecto consistirá en la administración, a lo largo de este año, de un tratamiento de inmunocontraceptivo en un centenar de ejemplares de las áreas periurbanas de los municipios promotores próximas al Parque Natural de Sant Llorenç del Munt y de San Cugat del Vallès. Antes de aplicar el tratamiento, los investigadores procederán a la identificación, la evaluación del estado reproductivo y la obtención de datos y muestras biológicas de cada ejemplar.
La fase experimental del proyecto se repetirá también en los próximos tres años. En total, está previsto vacunar más de 300 jabalíes. A lo largo de estos cuatro años los investigadores harán el seguimiento periódico de los parámetros biológicos de los ejemplares vacunados, para evaluar la efectividad del tratamiento.
El proyecto es el primero de estas características que se hace a nivel mundial en jabalíes urbanos y periurbanos. Permitirá estudiar la viabilidad y contrastar la efectividad de la aplicación de una vacuna inmunocontraceptiva en la población de jabalíes de vida libre para inhibir su función reproductora. La vacuna que se ha comenzado a administrar en Cataluña ya ha dado buenos resultados con venado en Estados Unidos de América y en jabalí en cautiverio en el Reino Unido.
Funcionamiento de la vacuna
Su mecanismo de acción es la creación de anticuerpos frente la hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH), hormonas que favorecen la función reproductora en los mamíferos. Tal como sucede cuando se aplica una vacuna contra una enfermedad, los animales recibirán una dosis inyectada (en este caso, vía intramuscular) para que, al cabo de unos días, empiecen a producir anticuerpos. La respuesta inmunitaria por parte de los individuos se presenta variable, con una duración de entre 2 y 5 años.
Mediante la determinación de las hormonas relacionadas con la reproducción, la observación de los tejidos de las gónadas y los títulos de anticuerpos se podrá determinar la efectividad de la aplicación de la vacuna. Así, si las hormonas disminuyen, los tejidos reproductores se muestran inactivos y los títulos de anticuerpos son elevados, se evidenciará una respuesta positiva frente a la vacuna.
El estudio científico del proyecto está coordinado por el Grupo de Investigación sobre Infertilidad (GRI-BCN) de la UAB, liderado por Manel López-Béjar, profesor del Departamento de Sanidad y Anatomía Animales. Participa también la investigadora Giovanna Masse, ecóloga del National Wildlife Management Centre, Animal and Plant Health Agency (APHA), coordinadora también de la entidad norteamericana NWMC en Europa y responsable de gestionar a nivel mundial los conflictos entre los humanos y los animales silvestres. Masse es referente internacional en la cuestión de la contracepción como herramienta de manejo de animales silvestres.
Las administraciones que promueven el proyecto decidieron impulsarlo ante la preocupación del aumento de la presencia de jabalíes en las zonas urbanas y periurbanas, áreas con la categoría de zonas de seguridad donde no se puede cazar y donde los animales encuentran refugio y alimento para su subsistencia. El objetivo responde a la necesidad de poner freno al ritmo de reproducción que está alcanzando el jabalí en estos lugares, a fin de disminuir el número de incidencias y mejorar la convivencia con la especie.
Una metodología complementaria para la gestión del jabalí
El proyecto piloto puede suponer una nueva metodología a tener en cuenta y añadir a las que ya se utilizan en la gestión del jabalí, según sus promotores, que no pretenden su utilización como medida única ni su uso a gran escala.
Por otro lado, cabe mencionar que la administración de esta vacuna no representa ningún riesgo en relación al consumo de carne de jabalí. La metodología propuesta es similar a la que se está utilizando en Australia y Nueva Zelanda desde hace más de una década en cerdo destinado al consumo humano.