El nuevo Plan de Ordenación Urbanística Municipal (POUM) de Lleida, en el que la Paeria está trabajando y prevé publicar su avance en junio, proyecta un crecimiento de la ciudad "de hasta 27.000 viviendas en el horizonte 2050". Así lo afirmó ayer el alcalde, Fèlix Larrosa, durante su visita junto al secretario de Estado de Vivienda, David Lucas, a las 121 viviendas de promoción pública que se están construyendo en los Mangraners.
El alcalde indicó que en el cómputo de las 27.000 viviendas se incluyen tanto nuevas construcciones como rehabilitaciones, y detalló que el 50% de las que haya en los futuros sectores urbanísticos de crecimiento serán asequibles. "En términos generales, hasta ahora se reservaba el 40%, pero en todos los nuevos sectores se alcanzará el 50%, de acuerdo con la normativa catalana", afirmó Larrosa.
Por su parte, Lucas explicó que el ministerio de Vivienda colaborará con la Paeria para llevar a cabo el proyecto de mejora urbana en la Mariola, para el cual "espero tener el proyecto tan pronto como sea posible". Valoró que "en estos momentos la colaboración, el entendimiento y la predisposición entre el Gobierno de España, la Generalitat de Cataluña y el ayuntamiento de Lleida son excelentes".
Asimismo, el alcalde explicó que en su reunión con el secretario de Vivienda "hemos reflexionado sobre la necesidad de contar con más residencias universitarias en la ciudad, que acogerían muy bien a los 4.000 estudiantes de la Universidad de Lleida que vienen de fuera y tendrían un efecto directo sobre el mercado de la vivienda".
Por otro lado, el Centro Histórico fue otro de los puntos en la reunión que mantuvieron Lucas, Larrosa, la teniente de alcalde Begoña Iglesias y el equipo técnico de la concejalía de Agenda Urbana. "Tenemos el reto de recuperar la habitabilidad en espacios que no están ocupados por personas y de generar nuevos ámbitos residenciales en aquellos solares en los que el ayuntamiento está desarrollando una acción muy decidida de compra", indicó el alcalde. Sobre esto, Lucas aseguró que "el objetivo del ministerio es recuperar los centros históricos, que han sufrido una gentrificación bastante intensa y se ha ido expulsando a las familias".
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