- ¿Cómo ve la evolución del mercado del vehículo eléctrico en España y Cataluña en los próximos años?
Llevamos unos últimos 3-4 años con un crecimiento constante, con un 30-40%, pero aun siendo positivo este dato, no es tan positivo el hecho que no estamos creciendo tanto como habría marcado la UE la penetración del vehículo eléctrico. Esperamos que esta inercia tienda a converger con el resto de los países europeos porque ahora podemos decir que estamos en la segunda división en la introducción de la electromovilidad en Europa.
- ¿Cuáles son las principales barreras que todavía impiden una adopción masiva de los vehículos eléctricos?
Una barrera muy importante tiene que ver con la adquisición de los vehículos eléctricos, puesto que no se matriculan a la velocidad adecuada porque la tasa impositiva y las ayudas a España son demasiado complejas de tramitar y hay demasiada burocracia.
Lo ideal sería que la ayuda se recibiera directamente cuando se adquiere un vehículo eléctrico cuando se realiza la compra. Ahora debes avanzar la ayuda para que se devuelva al cabo de los meses.
En cuanto a la infraestructura, existen unos planes para poner puntos de recarga que no se están cumpliendo. También estamos teniendo problemas burocráticos para poner en marcha puntos de recarga por la incrementación de la acometida.
- ¿Cómo valora la participación de Circutor en las licitaciones públicas para la instalación de puntos de recarga en municipios?
Es una participación que siempre ha estado allí, siempre hemos sido un fabricante de referencia a nivel nacional y hemos sido considerados por los técnicos de la administración pública como un fabricante de referencia y con un producto robusto y que se pueda mantener con el tiempo, cosa que nos favorece mucho. Empezamos a introducir nuestros productos desde el inicio y la gente nos conoce y reconoce.
Cada vez hay más pujas públicas, no sólo en municipios, sino también en departamentos de los organismos públicos que dispongan de flotas.
- ¿Cuáles son los principales retos que encuentran en estas pujas?
El principal reto es que hace 15 años, cuando empezábamos a participar en estas pujas, no había tanta competencia. Ahora lo que nos interesa es que las licitaciones tengan suficiente cuidado con las normativas que están por venir, que tienen que ver con el pago seguro, con evitar el fraude al ciudadano o usuario final, y que los puntos de recarga se puedan adaptar para incorporar nuevas tecnologías.
Es importante que los organismos públicos soliciten y hagan comprobar que todos los productos que adquieren cumplen con los requisitos que se pide, no sólo con autocertificados que puedan emitir los fabricantes sino por certificados emitidos por terceros. En definitiva, que todos juguemos con las mismas reglas. Las pujas son muy sensibles al precio, pero hay que vigilar que el proceso sea suficientemente limpio para todos y debe cumplirse la normativa.
- ¿Qué requisitos técnicos y normativos suelen pedir los ayuntamientos en estas pujas?
De inicio, los grandes ayuntamientos, los pliegos que sacan son muy clave y tienden a ser muy reproducibles por otros ayuntamientos con menos recursos. Nos hemos encontrado con pliegos técnicos más laxos y otros con organismos que trabajan muy bien la especificación para evitar tener futuros problemas. Es necesario garantizar un producto que al menos tenga una vida útil de 10 años.
Otro de los requisitos es el sistema de pago, que es obligatorio, que pueda compaginar APPS de puntos de recarga con usuarios puntuales que puedan pagar con tarjeta. También procesos para evitar el fraude, que el usuario pague sólo por la energía que consume. Otro requisito muy importante es la privacidad de los datos, ya que se tratan algunos de ellos sensibles. También es importante la interoperabilidad entre los diferentes fabricantes y que las piezas exteriores se vean bien, que envejezcan bien, que no se oxiden, y que se puedan tener piezas de repuesto de forma inmediata.
- ¿Cómo se adapta Circutor para cumplir con estas exigencias?
Hemos transformado a la empresa. Sigamos siendo un fabricante de material eléctrico y de eficiencia energética, es nuestra esencia, pero cada vez es más importante la parte del servicio. Ahora mismo la puja no se gana sólo por un precio y tener un producto competitivo, en muchos casos lo que hace decantar es que podamos evidenciar ofrecer un servicio que sea bueno en los próximos años.
- ¿Podría explicarnos las características y ventajas de los nuevos equipos Raption de Circutor?
Los nuevos equipos Raption responden a una necesidad del mercado: los vehículos eléctricos que están llegando tienen una mayor capacidad de autonomía. Como la capacidad de la batería está creciendo, necesitamos más potentes. Hasta ahora los cargadores compactos que estaban en 50, 100 y 150 kW y los hemos transformado en 80, 160 y 240 kW. Debemos tener potencias más elevadas.
También debemos tener en cuenta la experiencia de usuario. Las pantallas son mayores, disponible con más de 35-40 idiomas. También son accesibles por personas con sillas de ruedas, disponen de un sistema de gestión de cables para evitar accidente y evitamos la contaminación auditiva. Son muy fáciles de realizar un mantenimiento, pero a su vez también están pensados para evitar ser vandalizados.
- ¿Cómo ha sido la aceptación de estos nuevos equipos por parte de los ayuntamientos y qué impacto esperan que tengan estos equipos en la red de recarga eléctrica a nivel municipal?
Los ayuntamientos comienzan a saber de infraestructura de recarga y tienen un técnico especialista. Ahora que el nivel es muy superior, todo el mundo ha visto a los nuevos equipos Raption como una evolución muy positiva, ya que sus características hacen que sean muy bien recibidos por los ciudadanos.
El impacto, hasta ahora, no ha habido demasiados problemas, pero ahora hay una realidad que debe incrementarse la potencia de la red a la vez que los puntos de recarga piden más potencia. Hay proyectos parados a la espera de redimensionar la red de distribución eléctrica.
- ¿Cuál es la situación actual de la red de puntos de recarga en entornos municipales en España y más en concreto en Cataluña?
En mi opinión, es mejor porque cada vez hay más, pero también es mejor porque hay más puntos de recarga operativos. Desde hace años es evidente que no sólo es necesario poner puntos de recarga, sino también tener un contrato de mantenimiento. El problema no es poner puntos para recargar los vehículos eléctricos; el problema es que con el tiempo estos puntos no den problemas.
- ¿Qué acciones cree que deberían tomar las administraciones locales para fomentar una red más extensa y eficiente?
Los precios de los vehículos eléctricos están descendiendo, podemos prever que el crecimiento será imparable. Hay tendencia a que en los municipios se pongan hubs de recarga exteriores, pero también se ponen de interior para recargas más largas. Habrá que mejorar la red de suministro para alimentar estos cargadores. Debe fomentarse la electrificación de los vehículos, también los transportes públicos urbanos, como los autobuses.