La Agencia de la Energía del Ripollès es un ente dependiente de la Agencia de Desarrollo del Ripollès que da asistencia técnica a la gestión energética de los municipios para fomentar las acciones de ahorro y eficiencia energética en el ámbito público. Recientemente, y conjuntamente con la Asociación Leader Ripollès Ges Bisaura, están impulsando el proyecto TE21 de transición energética en municipios y comarcas.
- ¿Qué es la transición energética?
La transición energética es el cambio de modelo energético actual, basado en el uso de energías fósiles y nucleares, hacia un modelo 100% renovable. Pero, además, la transición tal y como nosotros la entendemos debe implicar un cambio social, político y económico. Pasa por un cambio en la manera que usamos la energía, siendo más conscientes y reduciendo su uso. Asimismo, se debe cambiar la forma en que distribuimos la energía, pasando de una distribución centralizada a un modelo de redes o descentralizado. Finalmente, la transición conlleva una democratización de la energía y una adopción de un modelo participado, haciendo que las instalaciones sean de la ciudadanía y, por tanto, seamos nosotros los que decidimos dónde y cómo la producimos.
- ¿Y el Pacto Nacional para la Transición Energética de Cataluña?
El Pacto Nacional para la Transición Energética de Cataluña consiste en una hoja de ruta para lograr una Cataluña 100% renovable para 2050, mediante un cambio de modelo energético. Entre otros, contempla el abandono de la energía nuclear, la reducción de la dependencia de los recursos fósiles, el empoderamiento de la ciudadanía para que adopte un rol más activo y participativo, a través de una comunicación clara y motivadora, y el apertura del mercado energético a la competencia regulada, la creación de un marco normativo e impositivo favorable a la transición energética.
- ¿Qué se analiza con el Informe de Transición Energética de los municipios?
En el informe que hemos elaborado, a partir del modelo de cálculo de Ramon Sans, analiza 4 bloques de información. Cabe decir que toda esta información la hemos extraído de fuentes oficiales como puede ser el Idescat, y que en caso de que se detecten errores, se habla directamente con el municipio y se genera un nuevo informe más preciso. Si hubiéramos querido hablar con los 948 municipios de entrada, no habría sido viable ni temporalmente ni por los recursos humanos de los que disponemos.
En cuanto a los datos analizados, en primer lugar analizamos los datos básicos del municipio o territorio: habitantes, superficie, población estacional en verano y población estacional en invierno.
En segundo lugar, datos de trabajo y ocio: población de ganado estabulado, trabajadores en barcos pesqueros, número de barcos de ocio, número de despegues en aviación pesada y también en ligera.
En tercer lugar analizamos 5 factores territoriales: diseminación, movilidad, frío en invierno, porcentaje de bosque y porcentaje de cultivo el municipio o territorio.
Finalmente, analizamos los porcentajes que el municipio o territorio considera adecuados de energía solar, eólica e hidráulica, así como los años previstos para hacer la transición. Para hacer la primera versión del informe, y por falta de datos, hemos trabajado con un porcentaje de 100% solar y una temporización a 25 años, aunque estos valores son revisables si un ayuntamiento determina con qué porcentajes quiere hacer su transición.
- ¿Qué conclusiones se extraen de este informe?
En cada informe detallamos la potencia nominal a instalar en el municipio, el coste de la inversión, el gasto acumulado en combustibles fósiles si se hace o no se hace la transición y el ahorro final.
De los informes que hemos generado podemos extraer una conclusión clara: la transición energética es completamente viable, económica y territorialmente hablando. Los valores que obtenemos a nivel de todos los municipios indican un ahorro aproximadamente 4 veces superior a la inversión efectuada. Y por lo que respecta a territorio, se necesita un porcentaje pequeño de territorio, sobre todo si rellenamos los tejados de placas.
- ¿Cuáles son los timings que se calculan para que un municipio pueda realizar este proceso?
Cada municipio tendrá un timing diferente, muy vinculado a la facilidad que tenga para hacer el proceso. En municipios muy pequeños, con muy poca o sin industria, este proceso será bastante rápido. La parte más costosa será el cambio de la totalidad de vehículos del municipio a eléctricos por el coste particular que tiene esta acción.
En general, nosotros establecemos un proceso de 3 etapas en el proceso de transición:
• Una primera etapa en la que se hará un cambio especialmente en uso doméstico, administración y empresas de consumo medio y bajo. Este cambio ocurrirá especialmente por poner placas en tejados, fomentar el autoconsumo.
• Una segunda etapa, que ya está empezando, que es la del cambio del parque de vehículos en eléctricos. Lo consideramos segunda etapa para la autonomía y precio de estos vehículos aún no les permiten estar tan extendidos entre la población como se quisiera.
• Y como tercera etapa entrarían los grandes consumos y soluciones térmicas, y aquellos cambios que tecnológicamente actualmente no se pueden llevar a cabo.
- ¿Los municipios están receptivos para hacer el proceso de transición energética?
Cada vez más. Una vez ven los números del informe no hay excusa posible y cada vez son más los que se interesan por el proyecto.
- ¿Cuál es la función de la Agencia de la Energía del Ripollès en el proceso de transición energética de un municipio?
Nosotros tenemos un doble trabajo. Por un lado, el trabajo de sensibilización, tanto de la población como de los políticos. Y por otro lado, una tarea de acompañamiento para verificar que el proceso se está haciendo de forma adecuada. Lo que no podemos hacer en ningún caso es un papel de ingeniería o de instalaciones. Como administración pública que somos no nos corresponde: los diferentes territorios ya tienen los profesionales adecuados para llevar adelante el cambio energético que necesitamos.