-¿En qué ámbitos se enmarcan sus servicios de consultoría?
Innopro es una consultora que tomando la innovación y la tecnología como base, opera en los ámbitos del desarrollo urbano y la economía regional diseñando e implementando proyectos de estrategia, innovación y desarrollo. Proyectos que aportan soluciones en campos concretos como la transferencia tecnológica, la I + D, la estrategia empresarial, organizativa y regional, los espacios urbanos innovadores, la promoción económica, la atracción de inversiones, los procesos de crecimiento, la emprendeduría, la formación y la gestión de la innovación, entre otros. Nuestros clientes son empresas, agentes tecnológicos, universidades y administraciones públicas a nivel local, regional y nacional.
-¿En qué consiste una estrategia territorial de especialización?
Una estrategia territorial de innovación define las apuestas de inversión y promoción en los ámbitos de la investigación, el desarrollo, la innovación, y de forma más amplia, la promoción económica. Parte de un diagnóstico realista y compartido de las fortalezas y debilidades de un territorio, y de una visión ambiciosa pero posible de desarrollo. Esta visión se articula en iniciativas, que pueden tener un carácter más vertical (proyectos de especialización en un sector concreto) o más transversal (programas de formación, emprendimiento o eficiencia energética para todos los sectores y el conjunto de la ciudadanía).
Una estrategia territorial de especialización debería servir para especificar a medio plazo las apuestas de apoyo público y las iniciativas público-privadas, y ordenar, en la medida de lo posible, las inversiones y programas de los municipios y agencias vinculadas, así como del resto de la cuádruple hélice. En resumen, y para concretar, una estrategia territorial de especialización debería servir para trabajar conjuntamente en el territorio funciones clave como el emprendimiento o la formación, así como para asegurar que las inversiones específicas (por ejemplo, en un sector o tecnología particular) cuentan con consenso y co-inversión.
-¿Nos podría comentar algunos Proyectos de Especialización y Competitividad Territorial (PECT) que estando realizado a través de su consultoría?
Actualmente estamos trabajando en cinco PECT que se están conformando con el fin de lanzarse este 2015. De ellos, tres son en territorios de ámbito metropolitano, y dos en comarcas no metropolitanas, con un nivel diverso de especialización económica en los sectores turístico, agrícola e industrial.
Esta es una diferencia importante, ya que en el ámbito metropolitano hay una concentración de universidades y centros de I + D que facilita el aporte de conocimiento y de expertos (tal como pide RIS3), pero la diversidad económica dificulta elección de especializaciones innovadoras claras. Por el contrario, en territorios menos densos donde hay un número inferior de agentes a implicarse, las iniciativas son más fáciles de identificar y la reducción en el número de agentes facilita la gobernabilidad de los proyectos.
-¿Cómo se transforma una ciudad en un ecosistema innovador?
Todo ecosistema es innovador en mayor o menor medida. Desde la situación de partida, la transformación del ecosistema se realiza a través de una multiplicidad y diversidad de iniciativas de éxito desarrolladas por diversos agentes o grupos de agentes. Unas iniciativas que deberían estar concertadas dentro de una visión conjunta de crecimiento económico basado en una apuesta por el talento, el conocimiento y la internacionalización. Desde el sector público, hay que velar para dotar de esta visión de conjunto estratégica en todos los ámbitos de actuación (urbanismo, promoción económica, educación, servicios urbanos, etc.) y asegurar que las inversiones y proyectos de cada ámbito conectan con el resto y con la cuádruple hélice del territorio. Además, es imprescindible facilitar el trabajo a las empresas e instituciones innovadoras, dándoles apoyo y construyendo colaboraciones a su alrededor.
-¿Qué oportunidades cree que tienen los ayuntamientos actualmente para definir una buena estrategia de promoción económica?
A nivel estratégico, hay que adelantarse a las tendencias y responder a las nuevas oportunidades, y por eso hay que tener conocimiento (buenas relaciones institucionales y presencia en los foros adecuados a nivel local e internacional) pero sobre todo trabajar de lado con los ciudadanos y empresas , ejecutando proyectos paso a paso, cada vez más complejos y conectados internacionalmente.
Las oportunidades específicas varían de ciudad a ciudad, pero tanto por la definición de la estrategia, como por su posterior ejecución y evaluación, es necesario un modelo organizativo en red además del aprovechamiento de las capacidades y talento de los agentes y actores de dentro y fuera del territorio. Igualmente, es clave internalizar la cultura del proyecto y basar el crecimiento en proyectos singulares (y preferentemente) a costes variables, siempre sobre una estructura de personal core estable y de alto nivel.
-¿Pero para ello es necesario un cambio de modelo y de mentalidad, no?
Los ayuntamientos están más abiertos que nunca a desarrollar estrategias e iniciativas innovadoras, conscientes del talento que hay fuera de sus servicios de promoción y de las oportunidades de financiación (a nivel local, catalán, español y europeo). En muchas ocasiones, han sido las restricciones normativas de la función pública, o de las diversas subvenciones y formas de financiación, las que han dificultado las iniciativas más innovadoras. Hay pues que construir los espacios de gobernanza y gestión adecuados para responder, con el apoyo político y el empuje a nivel técnico que esto requiere.
-Cuando pensamos en el crecimiento económico de un territorio una de las variables a tener en cuenta es la inversión extranjera, pero esto es muy complejo, ¿Cómo se capta?
Efectivamente es más que complejo, evitando el eufemismo: es difícil. Tampoco todos los territorios, por características objetivas o por masa crítica compiten en igualdad de condiciones.
De inicio, se deben identificar y documentar las ventajas competitivas del territorio y conocer las carencias. Sobre este diagnóstico, se define una estrategia y se construye un discurso comunicativo que maximice las fortalezas y mitigue las debilidades. Muy probablemente, el territorio por su configuración y tejido actual, sea más atractivo para unos sectores o tipos de inversión en particular.
Es el momento entonces de trabajar en tres vectores complementarios: 1) el acceso a mercados (es decir, ir a buscar a los potenciales inversores de forma focalizada de acuerdo con la estrategia), 2) la reducción de costes, tiempo y dificultades para la inversión (por ejemplo, en los ámbitos de urbanismo y servicios urbanos) y 3) diferenciación de la oferta de servicios (poniendo a disposición de las empresas servicios diferenciales provistos desde el sector público o en colaboración público- privada).
A largo plazo, es necesario trabajar sobre el entorno para mejorar las condiciones objetivas del territorio, por ejemplo en infraestructuras, calidad urbana, capital humano o agentes de conocimiento (universidades, centros I + D), entre otros.
En casos puntuales se puede apostar por proyectos específicos de atracción de inversión, como la atracción de emprendedores o la atracción de empresas que utilicen la ciudad como laboratorio, facilitándoles la experimentación además de apostar por proyectos con programas de compra pública innovadora.
-Un reto muy importante para los municipios en los próximos años será la reconversión de los polígonos industriales, algunos de los cuales experimentan altos grados de degradación, ¿Qué propone Innopro Consulting en este ámbito?
Además de los elementos físicos y urbanísticos, todo análisis y programa de trabajo para definir un proyecto sobre los PAEs debería centrarse en los que son los tres objetivos últimos de su existencia:
• Atracción de nuevas empresas
• Mejora de la competitividad de las empresas existentes, mediante el abastecimiento de servicios existentes y eliminando limitaciones para su crecimiento y productividad
• Generación de beneficios y externalidades positivas para el territorio, y su correcta cuantificación y comunicación
Teniendo presentes estos tres puntos hay que redefinir los PAE como nuevos Espacios de Actividad Económica (EAE), centrales en la economía catalana (sobre todo la industrial), y alineados con estrategias y modelos de desarrollo económico globales orientados a impulsar las actividades basadas en el conocimiento. Los PAEs son un activo clave, una infraestructura de país, que se debe tratar a todos los niveles administrativos. En este sentido, pensamos que la financiación FEDER gestionado por la Generalitat y también gestionado por la Administración Central puede ser de utilidad, pero siempre apalancar sobre lo más fundamental: la actividad e inversión privada.
-Para sacar adelante muchos de estos temas que comentamos hay que poder acceder a fondos de financiación, ¿Cuáles son sus recomendaciones?
La búsqueda de financiación es un elemento clave e imprescindible, y debe gestionarse de forma estratégica y al máximo nivel. En primer lugar, se deben conocer las fuentes y la tipología de proyectos posibles a todos los niveles.
Cada iniciativa o programa que se lleva adelante debe tener un programa propio de financiación, y la estrategia territorial de innovación debe consolidar estos proyectos en una matriz única que permita resolver el "sudoku", es decir, la asignación o paquetización de las diversas actividades hacia las convocatorias que se van abriendo. Ahora estamos al inicio del actual periodo de programación de los fondos europeos, de forma que hay mucho espacio para recorrer en los fondos regionales (que no olvidemos, están repartidos entre la Generalidad de Cataluña y la Administración Central), y en otros programas o prioridades europeas vinculadas a la innovación, la formación, la sostenibilidad, las smart cities o la colaboración entre territorios.