La flota móvil de observadores ambientales de uso compartido cuenta ya con 50 bicicletas eléctricas previstas en este proyecto, que se puso en marcha el mes de julio, cuando entraron en circulación los 200 patinetes eléctricos en toda la ciudad. El objetivo de este servicio de micromovilidad sostenible es evaluar el impacto de la polución en Terrassa y ofrecer a las personas usuarias mayores de 18 años una disponibilidad del servicio de 24 horas. Este proyecto pionero está impulsado por la Escuela Técnica Superior de Ingeniería en Telecomunicaciones de Barcelona (ETSETB) de la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC), en colaboración con el Ayuntamiento, y tiene una duración de un año.
La gestión de la flota corresponde a la empresa Reby, que es el operador que ha seleccionado el departamento de Telecomunicaciones de la UPC. Desde el 17 de julio, las personas usuarias pueden alquilar temporalmente los patinetes eléctricos a través de la App de Reby (que está disponible por Ios y Android), que informa del servicio, del coste y del estacionamiento, entre otros aspectos. Las tarifas para utilizar la bicicleta es de 0,5 € por el desbloqueo + 0,20 €/min, mientras que por los patinetes es de 1 € por el desbloqueo + 0,15 €/min.
La teniente de alcalde de Territori y Sostenibilidad, y regidora de Movilidad, Lluïsa Melgares, destaca que "estas 50 bicicletas eléctricas que completan la flota se incorporan en el marco de la Semana Europea de la Movilidad Sostenible. En este primer balance del funcionamiento de los patinetes eléctricos hemos comprobado que la micromobilitat facilita, y mucho, la intermodalidad en el transporte, y consideramos que, además, es la alternativa más rápida, económica y sostenible por el transporte interurbano. Creemos que apostar por una movilidad sostenible es clave dentro de la Revolución Verde que estamos impulsando desde el equipo de Gobierno y, de hecho, así se contempla en la nueva Ordenanza de Movilidad, que nos marcará el camino hacia el futuro".
Entre los beneficios de los vehículos de movilidad personal destaca su contribución a la disminución de la contaminación atmosférica y acústica, a la transición hacia una economía baja en carbono y a la intermodalidad con otros servicios públicos de transporte urbanos o metropolitanos (tren, autobús, metro...).
Esta iniciativa de la UPC permitirá, además, obtener datos de los agentes contaminantes, a tiempo real y a diferentes puntos de la ciudad, gracias a una flota de patinetes y bicicletas eléctricas para el uso compartido dotada, parcialmente, de sensores de agentes contaminantes atmosféricos, que están en proceso de validación, y que funcionará gracias a una plataforma tecnológica centralizada.
Un primer balance de julio y agosto
La flota entró en funcionamiento el 17 de julio, con 200 patinetes eléctricos distribuidos por todo el término municipal. El 80% de las personas usuarias han reconocido estar satisfechas o muy satisfechas del servicio y, las que han reaccionado negativamente, lo han hecho porque no podían encontrar una solución inmediata en las incidencias planteadas, una cuestión que se resolvió enmendando los problemas técnicos de la App. En estos casos, la empresa devolvió el importe del servicio. Hasta el 8 de septiembre, se contabilizaron un total de 494 consultas relacionadas, principalmente, con el sistema para abrir y y cerrar el candado, y al autobloqueo.
Hasta septiembre, las cifras de distancia, tiempo y velocidad por viaje han aumentado de manera progresiva, lo cual refuerza la apuesta por la micromobilitat sostenible por parte de las personas usuarias. Gracias al Internet of Things, los patinetes de Reby envían su localización cada cinco según si el vehículo está en circulación o bien cada 30 según si este está aparcado.
Otros datos de interés son:
• Las cifras más bajas se registraron el mes de julio, porque se relaciona con un periodo de conocimiento y aceptación del servicio. En agosto ya se detectó un incremento de un 11% en el uso de los patinetes eléctricos, con un crecimiento progresivo del tiempo y distancia por viaje.
• El máximo de viajes diarios, con 486, se contabilizó el día 31 de julio y el mínimo, con 48, fue el 17 de julio.
• Por franjas horarias, los patinetes eléctricos se utilizaron más de 20 a 21 h y menos de 5 a 6 h de la madrugada.
• Por días, la jornada que contabilizó más registros fue el martes, a diferencia de sábado y domingo, donde el servicio no se utiliza tanto. Se entiende que se opta más para coger los patinetes eléctricos los días laborables para realizar los viajes intraurbans.
• El distrito donde empiezan y finalizan más viajes es lo del Centro. Estos datos demuestran que la intermodalidad entre transporte público y una opción de movilidad compartida y sostenible es la más recurrente. La mayoría de los viajes empiezan alrededor de las estaciones de tren, que son también las zonas de finalización de trayecto y de aparcamiento más utilizadas.
• Las zonas no visitadas corresponden a las más periféricas. De cara a los próximos meses, se analizará la evolución de los trayectos para ver si es necesario reajustar el área de servicio. También se está estudiando en qué zonas las personas usuarias aparcan bien (a las "U" invertidas que hay en toda la ciudad destinadas a bicicletas es donde se tienen que dejar también los patinetes) y en qué puntos se considera que se hace de manera incorrecta para ofrecer un mejor servicio.