Cada escúter de la Guardia Urbana recorre a lo largo del año unos 40.000 kilómetros y consume unos 405,8 litros, por lo cual solo con la incorporación de estas 30 unidades eléctricas se obtiene un ahorro de 13.000 litros de combustible. Los nuevos vehículos destacan por una capacidad de aceleración rápida, una autonomía de 160 kilómetros sin cargar y una velocidad máxima de 129 kilómetros por hora.
La nueva dotación de escúteres eléctricos de la Guardia Urbana forma parte de la estrategia de apostar por la movilidad eléctrica y por tener una flota municipal sostenible y respetuosa con el medio. Actualmente, ya dispone de 372 vehículos eléctricos, cosa que supone un 40 % del total de la flota municipal.