La compañía Movistar ha presentado en el Ayuntamiento de Calafell diversas propuestas tecnológicas para la creación de una smart city. Esta presentación forma parte de una ronda de contactos con distintos operadores de comunicaciones, para conocer las soluciones técnicas de que disponen a tal fin.
El alcalde, Ramon Ferré, explica: “Cualquier adquisición que deba realizarse en el futuro deberá pasar por la correspondiente licitación pública, en la que podrá participar cualquier empresa. Lo que estamos haciendo ahora es únicamente conocer lo que está ofreciendo el mercado en materia de smart cities”.
La idea del Ayuntamiento no se limita a su gestión interna. Lo que quiere, incluso prioritariamente, son las ventajas que el smart city pueda ofrecer a la ciudadanía. Poniendo un par de ejemplos, Ferré menciona: "Queremos que haya herramientas para que el vecindario pueda saber si el autobús lleva algún retraso o que le salte una alarma si su consumo de agua es excesivo".
En este sentido, el Ayuntamiento trabaja en la línea de encontrar soluciones tecnológicas de uso sencillo y que puedan estar integradas en una única herramienta, y no herramientas distintas. También busca llegar a un modelo de ciudad supereficiente, de forma que sea sostenible, y siempre teniendo en cuenta que este desarrollo debe incluir no sólo aspectos económicos sino también sociales.
