El Ayuntamiento de Sabadell ha promovido dos medidas para reducir el mal olor que emana de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Sabadell Riu-sec generada en las diferentes fases del proceso de depuración. Las medidas han tenido un coste de casi 700 mil euros, financiados por la Agencia Catalana del Agua (ACA).
Por un lado, se ha instalado un sistema de desodorización -mediante un biofiltro percolador biotrickling- que se dimensionó partiendo de los datos extraídos de un estudio de identificación y caracterización de focos emisores de pudor a la EDAR elaborado por el grupo de tratamiento biológico de efluentes líquidos y gaseosos del Departamento de Ingeniería Química de la Universidad de Autónoma de Barcelona (UAB). Este sistema cubre los puntos problemáticos y permite extraer los compuestos orgánicos volátiles (COV), es decir, el ácido sulfhídrico (H2N) y el amoníaco (NH3). Esta instalación ha costado 427.964,60 €.
Por otra parte, se ha construido un silo de almacenamiento del fango deshidratado. Hasta ahora el barro destinado a tareas agrícolas se almacenaba en contenedores abiertos y la manipulación cuando el transportista autorizado se los llevaba provocaba focos de pudor a la zona. La construcción de este silo con una capacidad de 150 toneladas permite, cargar el barro directamente al camión. Este silo se ha construido por un importe de 271.337,05€.