Sant Cugat 2030, con desplazamientos sostenibles y saludables, agricultura ecológica y de proximidad y red de espacios verdes urbanos y espacios naturales está más cerca. El Ayuntamiento llevará a aprobación al pleno de marzo el Plan de Acción de Emergencia Climática, la hoja de ruta de las políticas municipales en emergencia climática que se desarrollarán en la ciudad hasta el 2024.
Se trata de un paquete de 63 acciones que allana el camino hacia este Sant Cugat del futuro con un 55% menos de CO2 en 2030. Este es el objetivo claro del Plan de Acción que va más allá del compromiso rubricado el Pacto de ‘Alcaldes por la Energía y el Clima’ de reducir el 40% de gases de efecto invernadero.
Las acciones se enmarcan en seis ejes:
• Transición energética y ciclo del agua: reducción del consumo de energía y agua y producción de más energía renovable
• Cambio en el modelo de movilidad: más uso del transporte público y de vehículos sostenibles
• Transición alimentaria: consumo de productos de origen vegetal, de temporada y proximidad
• Residuo Cero: consumo responsable, reducción de plásticos desechables y fomento de la reparación y la reutilización
• Infraestructura verde y biodiversidad: restauración de arroyos y torrentes, incremento de la biodiversidad de la fauna y los espacios verdes
• Transición cultural: cambios en los hábitos, consumo y ocio de la ciudadanía hacia modelos más sostenibles y saludables
Mireia Ingla, alcaldesa de Sant Cugat: "Estoy convencida de que con este plan de acción Sant Cugat puede ser una de las ciudades referentes en esta lucha contra el cambio climático. Un plan que va más allá de la administración pública y que interpela también la ciudadanía, porque sólo con el compromiso de todos vamos a salir ".
Alba Gordó, Comisionada para la Emergencia Climática y concejala de Sostenibilidad: "Adaptar la ciudad y prepararla para los impactos del cambio climático implica hacer una gran transformación. No hay alternativa posible: la zona mediterránea es de las más afectadas por el cambio climático y no actuar nos abocaría a un futuro devastador. Actuando haremos de esta una ciudad donde vivir ".
Siendo el primer municipio de Cataluña en número de instalaciones de autoconsumo fotovoltaicas (más de 525), Sant Cugat quiere convertirse en referente y ejemplo en las políticas contra el cambio climático. Y quiere serlo fundamentando el Plan de Acción en principios integrados de forma transversal en las 63 acciones fijadas: justicia climática y social, ecologismo, atención a la diversidad y la cohesión social, feminismo, nueva cultura energética, sostenibilidad, equilibrio territorial y participación.
Entre las 63 acciones destacan activar la Zona de Bajas Emisiones, incrementar la partida para la pobreza energética, aumentar la actividad agroecológica en el municipio, aprobó la ordenanza de gestión y prevención de residuos, implantar el Plan de Infraestructura verde local y ampliar el alcance de las actividades de educación ambiental.
15 meses de trabajo colaborativo
Desde la aprobación en diciembre de 2019 de la Declaración de Emergencia Climática, Sant Cugat ha vertebrado este Plan de Acción de la mano de la ciudadanía durante 15 meses de trabajo. El primer paso fue hace un año con la constitución de la Mesa de Emergencia Climática, un órgano de participación que permitió a la ciudadanía hacer propuestas sobre los diferentes ejes en mesas de trabajo digitales y a través del portal Decidim.santcugat.cat. Un trabajo que, entre otros aspectos, dio luz al sexto eje -la transición cultural- no previsto inicialmente en la presentación de la Declaración de Emergencia, documento que ya suma 350 adhesiones entre entidades y personalidades.