El Ayuntamiento de Sant Fruitós de Bages ha iniciado un proceso de reducción del consumo energético del municipio. Con este fin han empezado a racionalizar el gasto de luz en determinadas zonas del pueblo y se monitorizará el consumo del ayuntamiento y la guardería.
Puntos de luz más eficientes
Esta parte del proyecto consiste en analizar los diferentes puntos de luz del municipio y determinar si es necesario apagar algunos (sin desmontarlos), reducir o temporalizar la apagada, colocar de nuevos o reorientarlos. Actualmente ya se han hecho cambios en 17 zonas del municipio, concretamente en edificios municipales, plazas y jardines, zonas ornamentales, parques infantiles y algunas vías peatonales.
Según el concejal de Hacienda, Industria y Medio Ambiente, Xavier Racero, esta primera fase permitirá ahorrar 2.905 euros al año (sin tener en cuenta el IVA correspondiente ni el impuesto eléctrico) y “se trata de una medida de ahorro pero también de racionalización de la iluminación del pueblo”.
A mediados de septiembre se iniciará una segunda fase que consistirá en racionalizar la luz de 12 zonas más del municipio. Antes se realizará una reunión con los presidentes de las asociaciones de vecinos afectadas para informarles del tema, pero, por el momento, el presidente de la AA.VV. La Rosaleda, Josep Tarradellas, comenta que está muy bien que se hagan estas mejoras.
La monitorización del consumo eléctrico
Otra de las medidas para reducir el gasto es mediante la monitorización de éste. Según Racero el objetivo es ver online el consumo de los edificios municipales con potencial de ahorro más grande, en concreto del ayuntamiento y de la guardería.
Por ahora ya se han realizado les instalaciones y a principios de septiembre la monitorización estará disponible en el web del ayuntamiento y se podrán hacer los primeros análisis de la información.Desde el pasado mes de marzo el Ayuntamiento de Sant Fruitós se unió al Pacte d’Alcaldes i Alcaldesses per l’energia sostenible (PAES) y pretende seguir trabajando en más acciones para reducir el consumo del municipio.
Fuente: La Vanguardia